Comunicado
Global

Ataque perpetrado el fin de semana para intimidar a los actores humanitarios

Residentes en un campamento para IDP en  Monguno concurrieron a un debate de grupos focales.  Foto: Mshelia Yakubu/OIM

Ngala – El 18 de enero,  grupos armados no estatales atacaron una instalación humanitaria en la ciudad de Ngala, que se encuentra a aproximadamente 124 kilómetros de Maiduguri, la capital del Estado de Borno. Si bien se informó que todos los trabajadores humanitarios de las Naciones Unidas que se encontraban en la mencionada instalación – entre ellos tres miembros del personal de la OIM – estaban a salvo, una sección completa de la instalación fue incendiada al igual que uno de los pocos vehículos utilizados por los trabajadores humanitarios para brindar asistencia.

“El efecto pretendido de este accionar es intimidar a los actores humanitarios que trabajan en el noreste de Nigeria. Hemos sido testigos de esto mientras los trabajadores humanitarios son cada vez más el objetivo de estos ataques”, dijo el Jefe de Misión de la OIM Nigeria Franz Celestin.

La instalación que sufrió este ataque es uno de los nueve centros en Borno gestionados por la OIM. Los centros humanitarios son los que crean los entornos para que los trabajadores humanitarios puedan desplegar su accionar en los lugares en terreno que son de difícil acceso y tal tarea incluye alojamiento, oficinas y servicios de conectividad. Estos espacios tienen una importancia crítica para una respuesta humanitaria sostenida y efectiva en Nigeria.

“Estos centros (humanitarios) son las formas más modernas de permitir que los trabajadores humanitarios mejoren la calidad de la respuesta que brindan, puesto que les otorgan suficiente tiempo en terreno para hacer lo que se supone que deben hacer. Antes de que estos centros existieran, los trabajadores humanitarios solamente podían realizar viajes diarios, de modo que brindaban los servicios no de forma ininterrumpida sino sobre una base diaria”, sostuvo Celestin.

El ataque se da 11 días después de que los miembros de un grupo armado no estatal (NSAC) se infiltraran en la ciudad de Monguno. Dos niños, un hombre y una mujer fueron asesinados en el ataque perpetrado contra un campamento para personas desplazadas internamente. Adicionalmente, varias personas que resultaron heridas  están recibiendo atención médica en una clínica cercana que es manejada por ALIMA, una organización internacional no gubernamental.

El ataque fatal dejo a 2.728 personas sin hogar. De acuerdo informe de la Matriz de Seguimiento de Desplazamiento (DTM), emitido por la OIM, más de 300 albergues y propiedades de las personas afectadas fueron destruidos.

El conflicto ininterrumpido en el noreste de Nigeria sigue llevándose las vidas de personas inocentes, y cada vez más, también las de los trabajadores humanitarios. En 2019, doce trabajadores humanitarios perdieron sus vidas, el doble de la cantidad registrada el año anterior.

La DTM provee información detallada y actualizada del registro y elaboración de perfiles de las características y necesidades de las poblaciones afectadas por la crisis, de las poblaciones desplazadas hacia los campamentos y hacia entornos con características similares, ejercicios e informes sobre monitoreo de flujos, y también la información detallada sobre la infraestructura en áreas de retorno por medio de encuestas de evaluación de aldeas. Los informes y las herramientas de la DTM se encuentran aquí: https://displacement.iom.int/nigeria  

Lea la declaración de Edward Kallon, el Coordinador Humanitario de Naciones Unidas en Nigeria aquí

Para más información por favor contactar a Jorge Galindo, en la OIM Nigeria, Tel: +234 906 273 9168, Email: jgalindo@iom.int

El apoyo en caso de fallecimiento, crucial tras mortal ataque perpetrado en la zona noreste de Nigeria

Maiduguri – Los trabajadores humanitarios de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) siguen esta semana brindando asistencia a los sobrevivientes de un ataque perpetrado el 7 de enero contra un campamento de personas desplazadas internamente (IDPs) en la ciudad de Monguno que se encuentra en la zona noreste de Nigeria y que dejó como saldo la muerte de dos adultos y dos niños. La asistencia brindada a 130 personas hasta este momento, incluye, asesoramiento, primeros auxilios psicológicos y derivaciones a otros servicios tales como los de  provisión de alimentos y salud en el campamento del Gobierno instalado en la Escuela Secundaria Superior de Ciencias.

El ataque al campamento dejó a más de 2.700 personas sin hogar.

“El apoyo en caso de fallecimiento se le brinda a aquellas personas que están experimentando una pérdida, ya sea la pérdida de un ser querido o de una propiedad”, explicó Gladys Cheruto Kios, quien se desempeña como Coordinadora de Programa de Apoyo Psicosocial y de Salud Mental de la OIM Nigeria (MHPSS).

“Este apoyo emocional no se brinda solamente una vez, sino que se trata de un proceso ofrecido durante sesiones destinadas a trabajar el dolor y poder manejar un evento trágico”.

El apoyo en materia de salud mental y psicosocial es un componente clave de las intervenciones humanitarias en la zona noreste de Nigeria, una región que ha sido asolada por el conflicto a lo largo de una década. La OIM solicitó por primera vez los servicios MHPSS en Monguno hace dos años, en agosto de 2017.

La crisis humanitaria en la zona noreste de Nigeria se ha llevado las vidas de más de 36.000 personas, entre ellas 12 trabajadores humanitarios tan sólo en 2019. Más de siete millones de personas siguen padeciendo la necesidad de recibir urgente asistencia vital en los Estados de Borno, Yobe y Adamawa.

La ciudad de Monguno es el hogar de  159.542 IDPs entre ellas 52.784 niños. La OIM brinda soluciones referidas a albergues, artículos no alimentarios, agua, sanidad e higiene, apoyo psicosocial y en materia de salud mental, y coordinación y gestión de campamentos, destinadas a las poblaciones desplazadas que viven en la zona. Tan sólo en 2019, Monguno sufrió un total de nueve ataques de parte de grupos armados no estatales.