Comunicado
Global

Los migrantes abandonados en el desierto retornan a sus lugares de origen

Un grupo de 30 migrantes de India y
Bangladesh abandonados en las altas temperaturas del desierto de
Mauritania por los traficantes con poca agua, sin alimentos ni
documentos de identificación, está retornando
voluntariamente a su lugar de origen con la ayuda de la OIM.

El grupo, compuesto de 22 ciudadanos de India
y ocho de Bangladesh, había sido transportado por vía
aérea desde la ciudad del desierto de Mauritania de
Zouerate, a principios de esta semana, a la ciudad costera de
Nouakschott. Ayer, empezó su viaje de retorno por
Túnez y Dubai. Un grupo de la OIM acompaña a los
ciudadanos indios, mientras que el personal de la OIM presta
asistencia a su llegada a los ocho ciudadanos de Bangladesh en
Dhaka.

Se halló a todos los hombres en el
desierto, a las afueras de Zouerate, en diciembre de 2005. Algunos
de los hombres habían sido abandonados por los traficantes,
que los habían llevado a un lugar remoto, donde les
exigieron que contactaran a sus familiares para que le enviaran
más dinero, y de no hacerlo, serían abandonados.
Otros miembros del grupo se habían visto abandonados porque
había policías patrullando por la zona. En ambos
casos, los hombres se encontraban con poca agua y sin
alimentos.

Los migrantes pagaron a los traficantes entre
9.000 y 16.000 euros para que los llevaran a Europa, según
Vijaya Sauri, de la OIM, encargada de gestionar la
operación.

El grupo de indios afirmó que,
transcurridos cinco días viviendo con medio galón de
agua y tras verse obligado a beber finalmente su propia orina,
había perdido toda esperanza y aguardaba la muerte cuando lo
encontró una patrulla.

Los hombres, que desde diciembre vivían
en condiciones difíciles en Zouerate con un suministro
irregular y poca agua, sobrevivían sobre todo haciendo
cualquier trabajo que encontraran, como la colada o la limpieza.
Los 30 migrantes formaban parte de un grupo mucho mayor de unas 72
personas en Zouerate que incluía a pakistaníes y que
venía preocupando a la OIM desde principios de año.
Los otros miembros del grupo habían decidido volver a
intentar llegar a Europa recurriendo a traficantes.

Todos los años, miles de migrantes
irregulares del África subsahariana y del sur de Asia tratan
de llegar a las costas del norte del Mediterráneo a
través del Magreb sirviéndose de las redes de
tráfico.

“Los hombres se refieren a un lugar
llamado Campamento España donde los migrantes se
reúnen antes de separarse para dirigirse a sus destinos
finales en otros países europeos”, afirmó
Sauri. “Mientras estaba con este grupo de 30, recibieron
varias llamadas en sus móviles de otros migrantes que
decían que habían llegado a Campamento España.
También recibían llamadas continuas de traficantes
que les animaban a proseguir el viaje porque los agentes del
tráfico que se encontraban en India y Bangladesh no
querían tener que devolver el dinero que ya se había
pagado”, añadió.

Desde finales de 2004, la OIM ha asistido a
290 migrantes de India y Bangladesh que fueron abandonados en los
desiertos de África del norte para que retornaran a sus
lugares de origen de forma voluntaria. En diciembre del año
pasado, la OIM puso en marcha un programa de asistencia humanitaria
mundial para ayudar al número creciente de migrantes en
situación de abandono en los países de
tránsito y destino. Dado que la carga de trabajo de la OIM
está por encima de la demanda, el programa está
siempre necesitado de fondos.

Si desea más información,
póngase en contacto con

Armand Rousselot

Jefe de Misión de África Occidental

Tel: +221 869 6201

E-mail: "mailto:arousselot@iom.int" target="_blank" title=
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