La OIM participa en una reunión de tres días de
duración organizada por el ACNUR y el Gobierno de Djibouti
sobre cómo ofrecer una mejor respuesta a las necesidades de
migrantes, solicitantes de asilo y refugiados en situación
de peligro en el mar.

Este acontecimiento, que comienza hoy en Djibouti,
reunirá a representantes del gobierno y del mundo
académico así como a expertos de la OIM, el ACNUR, la
Organización Marítima Internacional, el CICR y la
FICR.

Los participantes identificarán los desafíos que
plantea la respuesta ante situación de peligro en el mar de
personas con diferentes perfiles y necesidades, incluidos
migrantes, refugiados y solicitantes de asilo, e intentarán
proponer medidas específicas para mejorar los rescates
marítimos, impulsar la cooperación interestatal y
desarrollar medidas prácticas para el rescate y desembarco
de personas rescatadas.

La atención internacional se ha dirigido recientemente
hacia los movimientos de somalíes y etíopes a lo
largo del Golfo de Adén, las crecientes llegadas por mar a
Australia y la llegada de personas del norte de África a
Europa.

Las personas que se encuentran en peligro en el mar, las
operaciones de búsqueda y rescate, el desembarco, el
procesamiento e identificación de soluciones, si bien
situaciones recurrentes, siguen representando desafíos para
los Estados, organizaciones internacionales y el sector del
transporte marítimo.

"A pesar del endurecimiento de las convenciones existentes para
fortalecer el régimen mundial de búsqueda y
salvamento, siguen existiendo carencias a la hora de aplicar estos
principios. Por ello, se necesitan urgentemente enfoques
cooperativos entre gobiernos, el sector del transporte
marítimo, ONG y organizaciones internacionales para
garantizar la seguridad y la protección de todas las
personas rescatadas en el mar", explica Irena Vojackova-Sollorano,
de la OIM.

Se ha resaltado además la importancia de respetar los
derechos humanos de todos los rescatados en operaciones
marítimas, independientemente de su situación legal.
Asimismo, debe prestarse una especial atención a las
necesidades específicas de grupos vulnerables, como menores
no acompañados, mujeres, víctimas de tratantes y
traficantes y personas que requieren de atención
médica, durante las actividades de respuesta, ya sea durante
el rescate o el desembarco, a bordo y posteriormente.
Además, deben respetarse siempre los principios de la
protección internacional, todo migrante rescatado en el mar
que solicite asilo debe ser derivado al ACNUR y a las autoridades
nacionales pertinentes.

La OIM, dentro del marco del proyecto Praesidium, colabora desde
2006 con el ACNUR y Save the Children en el Centro de
recepción y rescate de la isla italiana de Lampedusa.

Los tres organismos manifestaron recientemente su
preocupación con respecto a la decisión de las
autoridades italianas de declarar Lampedusa un puerto no seguro.
Ello podría socavar todo el sistema de rescate
marítimo de migrantes y solicitantes de asilo al dotar a
estas operaciones de mayor peligrosidad y complejidad. El cierre
del puerto de Lampedusa supone que la guardia costera del
país tendrá que recorrer 120 millas náuticas
más hasta alcanzar el próximo puerto seguro, Porto
Empedocle (Sicilia).

En febrero de 2007, la OIM prestó asistencia a un grupo
de 369 migrantes asiáticos y africanos sin papeles, quienes
permanecieron más de una semana a bordo de una
embarcación no apta para navegar cerca de la costa
mauritana. Finalmente, el Marine 1 pudo atracar en el puerto de
Nouadhibou (Mauritania septentrional), donde los pasajeros
recibieron la ayuda de la OIM, de la Media Luna Roja de Mauritana y
de la Cruz Roja española.

Para más información, póngase en contacto
con:

Vijaya Souri

OIM Djibouti

Tel: +41 79 635 2280

E-mail: "mailto:vsouri@iom.int">vsouri@iom.int