Suiza – La OIM, en coordinación con las Naciones Unidas, ha formulado un llamamiento por valor de US$ 95 millones para continuar proporcionando ayuda de emergencia que permita salvar vidas en Siria y países vecinos hasta finales de año.

Este llamamiento, formulado hoy, trata de obtener US$ 41 millones para proyectos en Siria como, por ejemplo, facilitar artículos de ayuda no alimentaria y alojamiento a familias desplazadas que los necesitan con urgencia, efectuar el seguimiento de los desplazamientos y continuar la repatriación de emergencia de trabajadores migrantes desamparados.

En torno a US$ 13 millones se destinarán a distribuir artículos de ayuda no alimentaria entre 500.000 personas y otros US$ 10 millones, a reparar refugios colectivos, repartir paquetes de ayuda para el refugio y conceder subvenciones en efectivo a unos 87.500 desplazados internos.

Alrededor de US$ 8 millones se emplearán en proporcionar protección y servicios comunitarios a los nacionales sirios afectados por el conflicto y llevar a cabo evacuaciones de emergencia de hasta 4.500 migrantes vulnerables desamparados.  La OIM ha ayudado ya a más de 3.400 trabajadores migrantes a abandonar Siria y retornar a sus países.  Mucho de ellos eran trabajadores domésticos de Filipinas.

Asimismo, se destinarán cerca de US$ 4 millones a programas de generación de ingresos que ayuden a los desplazados internos más vulnerables, en particular las familias encabezadas por mujeres, y otros US$ 4 millones a la formación de ONG locales asociadas, el seguimiento de los desplazamientos y la gestión de la información.

Los US$ 2 millones restantes financiarán la atención primaria de la salud y las derivaciones médicas de unas 50.000 personas afectadas por el conflicto.

Se estima que unos 6,8 millones de sirios (un tercio de la población) necesitarían ayuda.  Se considera que, de ellos, unos 4,25 millones estarían desplazados en el interior del país por la guerra.

El llamamiento pide US$ 54 millones para financiar proyectos en países vecinos, comprendidos el transporte de emergencia de refugiados desde la frontera hasta campamentos, los artículos no alimentarios de primera necesidad, el refugio y la atención médica para quienes huyen del conflicto.

Alrededor de 1,3 millones de sirios han abandonado ya el país y, según algunas estimaciones, se prevé que, a menos que la comunidad internacional logre un acuerdo de paz, está cifra se duplique a finales de año.  Hasta el momento, la OIM ha proporcionado ayuda para el transporte desde la frontera siria hasta campamentos en Jordania a más de 312.000 refugiados.

Igualmente, la OIM solicita US$ 3,1 millones para ofrecer protección a los refugiados en Jordania mediante más ayuda para las actividades de transporte de emergencia y de sensibilización, detección y tratamiento de la tuberculosis, de las que se beneficiarán hasta 420.000 refugiados en campamentos existentes y nuevos.

En el Líbano los US$ 14,2 millones que la OIM solicita se destinarán a distribuir artículos de ayuda no alimentaria entre hasta 65.000 refugiados, respaldar el programa nacional de detección y tratamiento de la tuberculosis, poner en marcha proyectos de apoyo a los medios de vida destinados a los refugiados, inscribir a los retornados libaneses y a los nacionales de terceros países que necesiten ser repatriados y prestar protección a los menores desplazados separados de sus familias.

En Turquía la OIM necesita US$ 9,3 millones para el pago de artículos no alimentarios de primera necesidad y servicios básicos como agua y saneamiento en los campamentos de refugiados, el transporte de emergencia, los servicios de salud y los proyectos de generación de ingresos.

En Iraq, con los US$ 25,5 millones que la OIM solicita, se distribuirán artículos de ayuda no alimentaria entre los refugiados residentes o no en campamentos, se llevarán a cabo proyectos sobre agua y saneamiento que abastecerán de agua potable a un máximo de 20.000 residentes en campamentos y se pondrán en marcha proyectos de generación de ingresos en los que participarán hasta 70.000 refugiados.

En Egipto los US$ 1,8 millones que la OIM solicita se destinarán a prestar servicios de atención primaria de la salud a un máximo de 60.000 refugiados, proporcionar apoyo psicosocial, elaborar mapas y perfiles de las familias de refugiados y emprender proyectos de medios de vida.

Durante la primera mitad de 2013 la OIM recibió US$ 16 millones para proyectos humanitarios de donantes como el Reino Unido, Kuwait, el Fondo central de las Naciones Unidas para la acción en casos de emergencia (CERF), Italia, la Dirección General de Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea (ECHO), Canadá y Suiza.

En ese mismo período, donantes, entre los que se incluyen Canadá, el CERF, China los Estados Unidos y el Reino Unido, concedieron otros US$ 10 millones a la OIM para los proyectos que lleva a cabo en países vecinos afectados por la crisis.  De esta cantidad, US$ 4,4 millones se destinaron a Jordania; US$ 2 millones, a Iraq; US$ 350.000, al Líbano; y cerca de US$ 3 millones, a financiación regional.

En 2012 la OIM recibió en torno a US$ 10 millones para los proyectos en Siria y países vecinos.  Entre los donantes se encontraban Alemania, los Estados Unidos, el Reino Unido, Suiza, el CERF, el ACNUR, Filipinas, Chile, Chipre y Eslovaquia.

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